miércoles, 29 de mayo de 2013

El romanticismo de la primavera


Hace años que la primavera y el verano son mis estaciones menos favoritas, aunque venga incluida en una de ellas las vacaciones, pero hoy, hoy ha sucedido algo, el reencuentro con Don Frappuccino + terraza al sol, a mediodía, en esa hora que "te conceden" en tu jornada laboral para comer. 

Creo que tiene algo adictivo, no soy muy de cafés, no exagero si os digo que bebí el primero hace un par de años, era probar uno, un sólo sorbo (pequeñísimo) me hacía fruncir el gesto (agggggh). Y ésta relación (de enganche... SANO) comenzó con la aparición de éste brebaje en mi vida, evidentemente, lo hay de más sabores, no sólo de café, pero ese cafecito, con nata, fresquito al sol, ha hecho que hoy me haya reencontrado con el romanticismo perdido hacia la primavera.

Para muestra un botón

Además ahora, por si aún estáis en duda, si vas te dan una tarjeta para otro Frapu de un 50% para el día siguiente, eso sí, si no lo pierdes ... que digo yo que vaya manera más tonta de gastar en papel y tinta, que den una semana para su canje.

Así que la primavera se me está antojando romántica, por esto y por Álvarez Gómez y su Agua Perfumada AGUACALMA, marca que siempre ha estado en las familias de tantos de nosotros, quizás por las abuelas, los papás ... en mi caso, siempre estuvo ahí, abría el enorme armario del baño, que ha seguido a mis padres desde antes que les siguiera yo, y ahí estaba. Todo lo que esté relacionado con mis padres es romántico, por amor, por el amor enorme que les tengo, y eso junto a mi plena adoración a los años 70, hacen que ésta marca me recuerde a los mismos, a los que amo y a lo que adoro. Los 70, con esos vestidos y pantalones campana, si existe la reencarnación yo estoy segura de que estuve allí!

Pasen una buena tarde, que se antoja también romántica, un poquito de lluvia siempre la hace.